El abordaje de las problemáticas habitacionales y ambientales constituyen un derecho nacional que el Estado debe garantizar y la sociedad debe participar activamente desde la complementariedad, de forma de lograr mejorar la calidad de vida de las familias del país.
Casas de Botellas es una propuesta que involucra a la sociedad en general en un trabajo en conjunto con las familias beneficiarias y con un enfoque multidisiplinario. Los propios beneficiarios, junto con el apoyo del grupo y de los voluntarios que se suman en forma solidaria, participan directamente y asumen el compromiso de ser artífices de su vivienda a través de la modalidad de auto-construcción, así como de la búsqueda de alternativas para su auto-sustentación.
La familia participa en todas las instancias: planificación, organización y ejecución del proyecto. A través de este trabajo en conjunto se logra involucrarlas en el compromiso y esfuerzo de construir su casa de botellas, su hogar. Se desarrolla un sentido de pertenencia y de valorización de la vivienda. Además, se promueve la capacitación de la familia sobre esta técnica constructiva, pudiéndola trasmitir solidariamente a otras personas que se encuentren en situaciones de vulnerabilidad, generando así redes sociales solidarias.
Consiste en un tipo de construcción alternativa que a su vez utiliza elementos de construcciones tradicionales como ser los cimientos. La mampostería en lugar de ser ladrillo o bloque se realiza con botellas y se utiliza una mezcla pobre que dependiendo del lugar en el que se implemente y de los recursos disponibles en la zona, sus principales componentes son la tierra o arena, portland y cal. Los pilares pueden realizase con un diseño particular también utilizando esta mezcla junto a las botellas y varillas de hierro. Se utiliza techo liviano, principalmente de chapa. Es así que se logra reducir los costos de la construcción.
Las botellas se rellenan de tierra o arena, de forma de lograr la consistencia requerida y se ubican de forma que el ancho de la pared sea igual al largo de la botella (sumado el revoque). Esto permite lograr paredes fuertes y aislantes (acústica y térmica), lo cual determina casas dignas de habitar.
Se pretende contribuir al desarrollo de soluciones habitacionales que contemplen la preservación del medio ambiente, principalmente a través de la re-utilización de las botellas de PET y fundamentalmente generando educación ambiental y compromiso con el planeta. A su vez, permite que los ciudadanos visualicen concretamente que sus esfuerzos por clasificar los desechos realmente tiene un fin palpable y útil.
De esta forma también se aporta información relevante para la exploración de técnicas constructivas alternativas, basadas en la autoconstrucción, de manera de fortalecer la inclusión y el compromiso social.
Promover la reutilización y valorización de los recursos disponibles permite además abaratar costos en la construcción de las viviendas.
Se apuesta a la integración y a la inclusión social, pues se permite la participación a la comunidad en general (instituciones, empresas, ONGs, sociedad civil, etc.) y la inserción de la familia en ella. De esta forma fomenta vínculos y redes sociales que contribuyen a construir una sociedad más integrada y un mundo “más habitable”.